Los proyectos ganadores de las becas 2021 muestran las relaciones entre los habitantes de la ciudad y sus localidades junio 29, 2021 – Publicado en: Destacada Museo Bogotá, Eventos del Museo de Bogotá, Museo de Bogotá, Museo de Bogotá, noticias – Etiquetas: , ,

El Instituto Distrital de Patrimonio Cultural – IDPC y el Museo de Bogotá ofrecieron estímulos por $97’000.000 en total para los proyectos que se postularan a las becas ‘Proyectos museográficos para vivir juntos’ y ‘Programación del Museo de la Ciudad Autoconstruida’

 

Bogotá, D.C., 29 de junio de 2021. Cuando a Luz Nelly Fajardo se le pregunta a qué sabe Sumapaz, crea imágenes con facilidad a partir de sus palabras: “sabe a campo, a hierba fresca, a leche recién ordeñada acompañada de amasijos de diferentes sabores y panelitas de leche. Sumapaz sabe a calor de hogar en una charla cerca a la estufa de leña que une a la familia mientras cuenta sus historias”.

Su inspiración viene de la fuerte relación que tiene con su localidad. Por eso, junto a un grupo de mujeres de Sumapaz, Luz Nelly quiso aprovechar el vínculo con el territorio para diseñar un proyecto que reconociera los saberes campesinos y las identidades forjadas en la localidad, mediante sus cocinas tradicionales. Rescatando sabores y saberes sumapaceños fue uno de los cuatro proyectos ganadores de la beca Proyectos museográficos para vivir juntos, con la cual el IDPC y el Museo de Bogotá ofrecieron cuatro estímulos por $80’000.000 en total para el desarrollo de proyectos en Sumapaz, Usme, Bosa y Kennedy.

Todos los proyectos están encaminados a evidenciar cómo vivimos juntos la ciudad en las cinco localidades mencionadas y cuál es la relación de sus habitantes con los entornos. Así, los proyectos se centran en la divulgación y preservación de la diversidad medioambiental y a reconocer el legado y trabajo de los antepasados. 

Por ejemplo, el Jardín Comunitario Jaime Beltrán, homenaje a los ancestros y a la identidad campesina es un proyecto que se desarrollará en Usme y espera fortalecer la apropiación del hallazgo arqueológico en la localidad. “Ese hallazgo ha sido positivo, porque ha logrado crear una identificación de la gente con el territorio, tanto rural como urbana. Usme ha mostrado que, como dirían los jóvenes que trabajan aquí, es un territorio de vida, de historia y un de saber”, afirmó María Buenaventura, integrante de Siembra de Memoria, agrupación que se llevó uno de los estímulos con este proyecto.

La agrupación Fanzaquía Cultivando eConsciencia, de la localidad de Kennedy, presentó la Apicápsula: una experiencia pedagógica museográfica, un proyecto que tiene como objetivo “generar liderazgos en la localidad para multiplicar el saber sobre la importancia y cuidado de los polinizadores, en este caso específico, de las abejas para la vida humana y el planeta en general”, explicó Sergio Armando Lesmes, integrante de Fanzaquía.

La preocupación por la consciencia medioambiental también la tiene la agrupación Biofonía, que con su proyecto Voces de la Tchupqua del Chiguasuque planteó un proyecto editorial para visibilizar “el conocimiento ancestral que hay en relación con el humedal Chiguasuque, cuál es la conexión en la localidad a través de la sabiduría de la comunidad Muisca que habita en Bosa, cuál es su relación con el agua, las problemáticas que se afrotan en el territorio y cómo se puede pensar, en un futuro cercano, en una mejor conexión con el espacio”, dijo Diana Marcela Apache, de Biofonía.

Por otra parte, el IDPC y el Museo de Bogotá también ofrecieron un estímulo por $17’000.000 para la beca Programación del Museo de la Ciudad Autoconstruida, ubicado en el barrio Mirador del Paraíso de Ciudad Bolívar.

El estímulo le fue otorgado a la agrupación Movimiento de Fotógrafos, que tendrá a su cargo la programación educativa y cultural del Museo de la Ciudad Autoconstruida durante cinco meses. El proyecto Memorias y relatos de la Ciudad Autoconstruida “aportará a un sentido identitario e incluyente a las comunidades barriales presentes en el sector aledaño al Museo y de la localidad de Ciudad Bolívar. Como eje transversal tendrá la voz del habitante, sus saberes y vivencias, reconocerá y contribuirá a las estéticas populares y contemporáneas que alojará el equipamiento, construyendo diálogos permanentes con las comunidades del territorio”, explicó Carmen Andrea Melo, del Movimiento de Fotógrafos.

 

El proceso de selección

Las dos becas que ofrecieron el Instituto Distrital de Patrimonio Cultural – IDPC y el Museo de Bogotá estuvieron enfocadas en el Sur de la ciudad. En total, se presentaron veintidós proyectos, de los cuales el grupo de jurados escogió cinco, divididos así: 

Proyectos museográficos para vivir juntos

$20’000.000 a cada uno de los cuatro proyectos escogidos.

  • Apicápsula: una experiencia pedagógica museográfica.

Localidad: Kennedy.

“Nuestra apuesta museográfica no solo contempla el uso de materiales sostenibles, sino también ser itinerante para llevar la experiencia lúdica y de sensibilización sobre el mundo de las abejas a diversos lugares y públicos”, Sergio Armando Lesmes; Fanzaquía, Cultivando eConsciencia

La Apicápsula es un dispositivo pedagógico-itinerante el cual se propone como un espacio de aprendizaje y encuentro, un medio para construir y aportar desde la trayectoria y saberes tejidos por la agrupación y los jóvenes al bienestar ciudadano, compartiendo conocimientos mediante procesos de formación ambiental y desde el aporte de la museografía.

  • Rescatando sabores y saberes sumapaceños.

Localidad: Sumapaz.

“El impacto que queremos dejar en Sumapaz es tradición, trabajo arduo, resistencia, resiliencia a pesar de las circunstancias y la memoria escrita para las generaciones venideras”, Luz Nelly Fajardo, agrupación Mujeres Emprendedoras con Manos Unidas Rescatando Saberes desde las Cocinas Sumapaceñas

Mediante una muestra de cocinas tradicionales y memoria campesina, este proyecto basará su propuesta museográfica en una etapa y un proceso de investigación participativo en el que se busque reconocer parte de la identidad campesina sumapaceña mediante los saberes y prácticas culinarias, pero al tiempo, bajo las relaciones sociales, culturales, históricas, económicas, políticas y ambientales que tienen lugar en este espacio.

  • Voces de la Tchupqua del Chiguasuque.

Localidad: Bosa.

“Queríamos una herramienta a la que pudiera tener acceso la comunidad muisca de Bosa, los colegios cercanos al humedal Chiguasuque y los líderes ambientales”, Diana Marcela Apache, agrupación Biofonías.   

Proyecto editorial de sensibilización ambiental para la visibilización de las historias de la Tchupqua (humedal) Chiguasuque, su estructura ecológica, problemáticas sociales y ambientales y la visión ancestral de la comunidad Muisca frente a este patrimonio ambiental.

  • Jardín Comunitario Jaime Beltrán, homenaje a los ancestros y a la identidad campesina (agrupación Siembra de Memoria)

Localidad: Usme.

“Este jardín espera ser una puerta de entrada o una forma más de apropiarse de ese hallazgo arqueológico en Usme, de esos saberes, de esa riqueza ancestral y viva de Usme”, María Buenaventura, agrupación Siembra de Memoria.

El proyecto propone la creación colectiva de un jardín comunitario en un sector del hallazgo arqueológico de la localidad. El Jardín Comunitario Jaime Beltrán es un homenaje a los ancestros y a la identidad campesina, y cuya forma, diseño y plantas serán decididos en comunidad.

Programación del Museo de la Ciudad Autoconstruida

$17’000.000 para la ejecución del proyecto ganador.

  • Memorias y relatos de la Ciudad Autoconstruida

Localidad: Ciudad Bolívar.

“Este proceso se realizará mediante actividades que aporten a la formación de públicos para las diferentes manifestaciones artísticas, culturales y patrimoniales, que reconozcan su aporte en la construcción de hacer y ser transmisores de memoria”, Carmen Andrea Melo, Movimiento de Fotógrafos.

Se propone la programación de actividades por cinco meses del Museo de la Ciudad Autoconstruida (Ciudad Bolívar), que permita aprovechar espacios diversos para la formación, la práctica y la participación de los vecinos habitantes del sector del barrio el Paraíso, como organizaciones, colectivos y artistas de la localidad, pertenecientes a los diferentes grupos poblacionales, reconociendo sus saberes tradicionales, oficios e intereses, en pro de la construcción constante de la memoria y el patrimonio local.